(Traducción del artículo publicado por Timothy Puko en el Pittsburgh Tribune-Review el 12 de septiembre de
2013)
El éxito excesivo
se está convirtiendo en un problema para los perforadores de
esquisto de Marcellus. Según una
investigación publicada el martes por Bentek Energy LLC, las
formaciones de esquisto como las de Marcellus están produciendo
tanto gas natural que el suministro de la nación excederá su
demanda para 2014.
El consultor dijo
que sus modelos muestran que la producción en Pensilvania y Ohio
será ocho veces mayor que el crecimiento de la demanda durante los
próximos 10 años.
«Hemos tenido que
retroceder con respecto a acciones muy rentables que hace solo unos
años se suponía que crecerían enormemente», dijo Justin Carlson,
analista de Bentek y primer orador del martes en la Natural Gas
Utilization Conference de Penn State de 2013. «Es una oportunidad
significativa para los consumidores finales».
La conferencia, que
celebraba su tercer año, llevó a unas 200 personas al hotel Omni
William Penn, en el centro de la ciudad, donde oficiales de Penn
State y sus socios industriales pudieron promover el incremento del
uso del gas. Tras todo un día de presentaciones, programaron que
unos autobuses con combustible de propano los llevasen a una
recepción en Market Square, que llenaron con una demostración de
camiones y furgonetas propulsados con gas natural.
Los oficiales
industriales y los impulsores están tratando de convencer a todo el
mundo de que pueden suministrar combustible barato para una
revolución energética… si simplemente los consumidores se
preparan para comprarlo. Según declararon oficiales y analistas,
aunque el esquisto de Marcellus ha producido mucho, solo la falta de
compradores le ha impedido producir más.
Las centrales
eléctricas y los productores están utilizando más gas, pero el
país necesita aún más infraestructura para que su industria de
perforación siga creciendo. Carlson dijo que los perforadores
tuvieron que retroceder en 2009 y 2012 cuando el aumento de
suministro resultó ser mayor de lo que el país podía utilizar.
«Hay un componente
educacional» en el hecho de impulsar la reforma del uso del nuevo
gas, declaró Matt Henderson, administrador de inversiones de gas de
esquisto en Penn State’s Marcellus Center for Outreach and
Research, centro que ayudó a organizar la conferencia. «Lo vemos,
estamos acostumbrados a él (en Pensilvania). Pero en el resto del
país todavía es algo nuevo para mucha gente».
Todavía se
desconoce cuándo empezaran los consumidores a creer. Muchas personas
de la audiencia eran proveedores de componentes.
El Elliott Group de
Jeannette quiere vender sus compresores y turbinas a la rama química
del Royal Dutch Shell Plc si este decide construir una central de
varios miles de millones de dólares que está considerando para
Beaver County, según dijeron oficiales de Elliott. Si esos tipos de
desarrollos ocurren más pronto que tarde, sería un gran empuje para
el negocio, dijo George Adda, vicepresidente de mercadotecnia
corporativa de la compañía.
«Creo que van a
salir (los nuevos proyectos)», dijo Adda. «La pregunta es cuándo».